GALIT GARZON: 
Una Mente Creativa en Movimiento

GG: Desde pequeña, siempre me consideré una persona sumamente creativa, constantemente perdida en mis propios pensamientos y creando en mi mente. Mi interés por el arte no fue una excepción; Sin embargo, al graduarme del colegio, me encontré sin rumbo. Me di cuenta de mi amor por la moda y decidí estudiar diseño de moda, lo cual disfruté enormemente. Luego, quise seguir explorando, me cambie a bellas artes y llegué a descubrir qué era el camino que debía seguir.

Siempre he sentido fascinación por la naturaleza humana y nuestro comportamiento. Esto me llevó a experimentar con la pintura corporal y la fotografía, dando origen a mi proyecto “THE HUMAN Canvas”. Al ver respuestas positivas en la audiencia, me di cuenta de que podría convertir mi pasión en una carrera.

Desde entonces, he explorado diversas formas de expresión artística: fotografía callejera, pintura, dibujo, arte digital y más. Me encanta seguir las tendencias y desafiar las expectativas. No me conformo con un solo medio; mi objetivo es conectar con la gente y seguir evolucionando. Esto me ha llevado explorar otros campos como el del cine, donde dirigí y produje mi primer cortometraje.

No me limito a ser solo una artista plástica. Me considero una creativa que usa diferentes sombreros. No sigo reglas establecidas; hago lo que quiero, lo que me apasiona. No por rebeldía, sino porque siempre he sido así. Esta es mi personalidad, y es lo que me ha llevado a donde estoy hoy.

GG: Mi búsqueda interna siempre ha sido la de conectar con las personas y el mundo, de transmitir un mensaje. Fue por esa razón que me adentré en el cine, ya que sentía que un lienzo era demasiado limitado para expresarme. Necesitaba contar historias, porque al final del día, eso es lo que todo artista anhela: contar una historia a través de su arte, ya sea pintura, película, canción o lo que sea. Creo que esta pasión surge del fuego interior que arde en todos los creativos, y en realidad, en cualquier persona. Son los momentos mundanos de la vida los que me inspiran y me llevan a crear estas obras de arte o a escribir un guion para una película. No tengo un pintor o artista favorito en particular, porque creo que mi mayor musa son las pequeñas cosas de la vida. Puede ser ver una película que me conmueva profundamente, escuchar una canción que me erice la piel, o incluso tener una conversación aleatoria con alguien que me haga ver las cosas desde una nueva perspectiva. Esa es la belleza del arte: es tan personal y subjetivo, pero al mismo tiempo, tan universalmente compartido.

GG:

En cuanto a los bloqueos creativos, diría que la clave está en reforzar la disciplina. Puedes tener mucho talento y grandes sueños, pero si no los pones en práctica con disciplina, no llegarás a ninguna parte. El mundo está lleno de personas talentosas; lo crucial es cómo llevas esas ideas de tu mente a la realidad. Para mí, por ejemplo: el hacer deporte se ha convertido en una especie de meditación. Necesito hacer ejercicio todas las mañanas para comenzar bien el día. Otra es, la organización que se ha vuelto fundamental en mi vida.

Necesito tener una estructura, aunque no trabaje en una oficina ni para nadie más que para mí misma, siempre intento mantener una rutina estructurada, aunque cada día sea un poco diferente. Eso es lo que me da paz y me ayuda a superar cualquier bloqueo creativo que pueda surgir.

GG: Vivir del arte es más que solo dedicarme a mi propia expresión creativa. También me involucro en otros proyectos que me permiten explorar diferentes campos. Desde el año pasado, fundé mi propio estudio creativo donde asesoro a marcas en su imagen y propósito. Me apasiona la comunicación con la gente y ayudar a construir algo desde cero para impactar positivamente en sus vidas. Creo que vivir de la creatividad implica un compromiso constante de fortalecimiento, y por eso, para mí, estar encerrada en una oficina simplemente no es una opción.